Las malas sensaciones se confirmaron la siguiente semana al ofrecer una pésima imagen en casa frente al Villarreal cayendo derrotados por 0-2 sin ningún síntoma de posible reacción, además jugando contra los futbolistas suplentes del club amarillo, y obteniendo un resultado que dejaba a los castellonenses definitivamente en puestos Champions. En cambio en la jornada 35ª las escasas opciones europeas se esfumaron al empatar 2-2 en casa del colista Getafe, resultado que a punto estuvo de ser una derrota pero un enorme Diego Alves volvió a salvar al equipo.